Japón DIA 16: Osaka-Suita

Por la mañana escribí a la familia que me invitó a su casa en el lago Biwako, y comencé mi aventura, primero, mirando los alrededores del camping. Y en esto ví que había hecho el tonto entrando en el camping, porque lo único que me aportó fue agua caliente y los alrededores estaban llenísimos de parques “gratis” y con lavabos. Pero claro, llegué a la noche rendido como para buscar esos parques.

La odisea comenzó queriendo ver un museo de Tadao Ando (sí, os vais a aburrir de oírlo durante varios días porque él es de Osaka y todo lo hizo aquí. Además, el resto de arquitectura no es interesante).

Antes de salir de la isla que contenía el parque vi éste edificio (Y pregunté qué era, por si alguien lo sabia). A continuación, en un cartel ponía que era una incineradora de basura. Esto de hacer que una incineradora parezca un parque de atracciones no es original de aquí. Hace muchos años lo ví en Viena, donde un artista famoso allí hizo una incineradora con un aspecto atractivo. (Antonio me recordó que lo diseñó un tal Hundertwasser):


Para atravesar Osaka, donde hay haste 3 niveles de autopistas (toma ya), las bicis pueden pasar por debajo de algunos puentes y sólo de algunos. Eso quiere decir que Sergio se tiene que dar oooooootra vez la vuelta a Osaka para llegar hasta le museo. Y esto lo hice pasando por la zona industrial del puerto (feísima). Pero para colmo me comí un tifón completo que me dejó chorreando.



Conseguí ver el museo de Tadao ando por fuera porque no tenia nada en su interior: estaba sin uso. Es su día fue diseñado para albergar una sala de cine 3D y cuadros modernos.
Como yo quería haber entrado y con las ganas de haber entrado, entré en el edificio de al lado aquarium. Se supone que el estanque es el más grande del mundo y que tiene un tiburón ballena.





Muy bonito pero todo lleno de niños y peces. Tiene una cosa chula: a los niños se les permite dormir por la noche junto a los peces.

Y ya con esto, llamé a Akikosan para dirigirme a su casa. Eso no era cosa fácil, porque las direcciones en Japón son muy chungas. Pero lo peor es que me vino el segundo tifón y yo parecía un garbanzo en un potaje: solo abrír la boca me permitia beber agua. Akiko, preocupada fue a buscarme. Pero yo no sabía dónde estaba. Al final conseguimos encontrarnos. Y me dejó ducharme en su casa y –es mas- me llevo a casa de sus padres en coche. Con esto desmonté la bici para meterla en el coche.



Los padres de Akikosan son un encanto, y no paraban de contarme cosas. El padre bromeaba conmigo en japonés ¡pero eran chistes muy complicados!. Por ejemplo, hablando de la universidad Todai, que es de las primeras en Japón, me dijo que el también había estado en Todai para mi sorpresa. Pero resulta que Todai significa también faro.

La madre de Akikosan estudiaba inglés y más bien la estaba obligando a hablar inglés (ella encantada, vamos).

Y ya muy tarde me fui a la cama, que mañana debía coger la bici para ir a muchos sitios.


RUTA:


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1 Comentarios・コメント・COMMENTS:

Xanday 22 de agosto de 2011, 18:28  

Vaya tela con el tifón, tiene que ser interesante eso de beber agua abriendo la boca... :P

^^ 蛙がなくから帰ろ

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